El alcohol distorsiona la formación de recuerdos a escala molecular
Un par de copas en una noche son suficientes para que el cerebro ‘distorsione’ la manera en la que forma los recuerdos.
Este el resultado de un nuevo estudio, publicado en la revista Neuron, en el que se apunta que la ingesta de alcohol no tan solo modifica formación de recuerdos sino que, además, es la responsable de que cambien las proteínas expresadas en las neuronas, formando así antojos.
Este fenómeno ocurre a escala molecular y, según apunta el estudio, podría ser la razón por la que los alcohólicos pueden volver a recaer tras años de abstinencia.
Investigación
Para esta nueva investigación, Karla Kaun, profesora asistente de neurociencia en la Universidad de Brown y autora principal del artículo, trabajó con un equipo de estudiantes universitarios, técnicos e inves...