“Cada año en España fallecen 1 500 personas por cáncer oral debido a que el 75 % de los casos son diagnosticados en estadios tardíos”.
Luis Alberto Moreno López, Universidad Complutense de Madrid and Gregorio Garrido Cantarero, Salud Madrid
Este era el inicio de los mensajes en medios de comunicación que durante el pasado mes de noviembre informaban de la campaña de prevención del cáncer oral que ha llevado a cabo el Consejo de Dentistas de España. A través de estos mensajes en medios de comunicación los dentistas de España han informado sobre aspectos preventivos frente a este cáncer y sobre la importancia del diagnóstico precoz mediante revisiones en la consulta dental.
Desde hace años sociedades científicas como la Sociedad Española de Medicina Oral, junto con los Colegios Profesionales y el Consejo de Dentistas, han creado recursos para hacer llegar a los ciudadanos la importancia del diagnóstico precoz de esta enfermedad. También que los mejores profesionales para este diagnóstico precoz son los dentistas, tanto por su formación en el diagnóstico como en la accesibilidad para los pacientes.
¿Cuáles son los factores de riesgo?
El cáncer oral presenta varias características que lo podrían hacer fácilmente evitable. Por un lado tiene dos principales factores de riesgo reconocidos y evitables: el consumo de tabaco y alcohol.
Por otro, su diagnóstico precoz no requiere de complicadas pruebas diagnósticas, solo la exploración clínica por parte de un profesional de la salud oral.
A pesar de esto, su número sigue un lento pero continuo aumento. Además, su supervivencia no experimenta grandes avances desde hace años.
Otro de los factores que influyen en la aparición de esta enfermedad es la dieta. Desde hace años conocemos que una dieta rica en fibra y frutas y verduras es un factor de protección frente a estos tumores.
El otro factor de riesgo que se involucra en estos tumores es el Virus del Papiloma Humano (VPH). Así como su papel en el cáncer de faringe es claro, en el cáncer de la cavidad oral no lo está tanto, aunque sí se conoce que está implicado en el proceso de transformación maligna de los tejidos.
Las previsiones de casos de cáncer oral para 2020 que en 2019 publicó la Red Española de Registros de Cáncer (REDECAN) para el conjunto de España eran de un leve ascenso. En su nota de prensa se hablaba de un “estancamiento en el número de cánceres en España. Sin embargo, cabe destacar el continuo aumento de nuevos casos en mujeres, de casi un 1 % respecto a 2019, frente al descenso de la incidencia en hombres de más de medio punto”.
Conseguir un mínimo aumento en el número de diagnósticos de tumores malignos era una buena noticia, teniendo en cuenta que en el caso de los hombres la previsión era de un descenso.
Y entonces llegó la pandemia
En 2020, y durante 2021, la pandemia de covid-19 provocó consecuencias a todos los niveles. También en el diagnóstico de casos de cáncer en general, y de cáncer oral en particular.
En la Comunidad de Madrid ya se han publicado los datos de diagnóstico de cáncer por parte del Registro de Tumores de Madrid (RTMAD) durante 2020.
RTMAD ha hecho un análisis del número de casos por mes para poder medir el efecto de la pandemia en los procesos diagnósticos y sus datos son muy claros. El número de diagnósticos disminuyó bruscamente a partir del mes de marzo y retornó a su tendencia inicial a partir del otoño de 2020.
Los datos también muestran que lo que ha sucedido es una disminución en los diagnósticos de cáncer, pero esta disminución no ha sido por igual en todas las localizaciones. Tomando en conjunto todos los cánceres la disminución ha sido de un 9,9 %. Sin embargo, en el cáncer oral la disminución ha sido de un 3,5 %.
No tenemos datos que puedan explicar esta diferencia, pero quizás se pueda deber a que la actividad en las consultas dentales solo se redujo apreciablemente durante los meses de primavera. Por parte del Consejo de Dentistas se llevó a cabo la recomendación de una serie de medidas de protección frente al virus que permitió una vuelta a la actividad en las clínicas dentales ya antes del verano, mientras que a nivel hospitalario la situación asistencial permaneció saturada durante más tiempo.
Pero no solo ha disminuido el diagnóstico, sino que este se ha realizado en estadios más avanzados de la enfermedad. Esto provoca un peor pronóstico de estos pacientes que se plasmará en los datos de mortalidad de los próximos años.
Durante 2020 no solo se cancelaron intervenciones quirúrgicas, sino gran cantidad de consultas diagnósticas. Todas las previsiones quedaron desfasadas ante la reorganización de los sistemas sanitarios, que aún no ha terminado. Esto ha supuesto una disminución en el número de diagnósticos de cáncer y un mayor diagnóstico tardío, también de cáncer oral.
El cáncer oral en gran medida está asociado a hábitos de vida modificables, pero no conseguimos romper la tendencia de continuo aumento de los casos. Las campañas de prevención y diagnóstico precoz siguen siendo necesarias para intentar disminuir los casos y para mejorar el pronóstico de los enfermos.
La reorganización sanitaria provocada por la pandemia y toda la actividad asistencial que no se ha podido llevar a cabo han supuesto un drama para los enfermos del virus. Dentro de unos años podremos evaluar realmente las consecuencias sanitarias globales de esta pandemia.
Luis Alberto Moreno López, Profesor Contratado Doctor Interino. UCM., Universidad Complutense de Madrid and Gregorio Garrido Cantarero, Responsable del Registro de Tumores. Especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública. Hospital General Universitario Gregorio Marañón, Salud Madrid
Este artículo fue publicado originalmente en The Conversation. Lea el original.