La búsqueda para reinventar la anestesia
Antes de 1846, la cirugía era una práctica rudimentaria y brutal, que solía realizarse en pacientes conscientes y atados a sus camas. Entonces, un dentista de Boston demostró públicamente que el éter dietílico, una sustancia química altamente inflamable, comúnmente llamado éter, podía dejar al paciente inconsciente e insensible al dolor. De la noche a la mañana, la cirugía se convirtió en un elemento clave de la medicina moderna.
por Cameron Scott, Universidad de California
La cirugía ha avanzado drásticamente desde entonces, incorporando laparoscopios y láseres, articulaciones de titanio y órganos trasplantados. La anestesia ha cambiado mucho menos, con solo la aparición de unos pocos fármacos mejores.
El éter dio paso a sus parientes químicos menos inflamables. Los barbi...