
Cuando el sistema inmunitario no funciona correctamente, las personas se vuelven más susceptibles a infecciones causadas por virus, bacterias u hongos. Investigadores del Centro Médico de la Universidad de Radboud han demostrado que un fármaco existente puede revitalizar las células inmunitarias que no funcionan correctamente. Estos hallazgos ofrecen nuevas pistas para futuras investigaciones en pacientes ingresados en la unidad de cuidados intensivos (UCI) con sepsis.
Alrededor del 20% de las muertes a nivel mundial se asocian con sepsis, y es la principal causa de muerte en las UCI. La sepsis se caracteriza por una insuficiencia orgánica, por ejemplo, renal o pulmonar, causada por una respuesta inmunitaria desregulada a una infección.
Los pacientes con sepsis suelen estar tan graves que terminan en la UCI, donde aproximadamente un tercio fallece. Durante mucho tiempo, los médicos creyeron que la mortalidad relacionada con la sepsis se debía únicamente a una respuesta inmunitaria aguda excesivamente agresiva que daña los órganos. Ahora se sabe que la mortalidad también puede ser consecuencia de una respuesta inmunitaria gravemente suprimida, conocida como parálisis inmunitaria.
Los pacientes con parálisis inmunitaria no pueden combatir eficazmente su infección existente y son muy vulnerables a nuevas infecciones, por ejemplo, causadas por hongos.
Investigación en voluntarios sanos
Esto representa un desafío para los investigadores de todo el mundo sobre cómo corregir la respuesta inmune desregulada en pacientes con sepsis.
Para abordar este problema, un equipo de investigadores de Radboudumc en Nimega estudia la respuesta inmunitaria en voluntarios sanos. Desencadenan una respuesta inmunitaria controlada en estos participantes inyectando fragmentos de bacterias muertas, llamadas endotoxinas. El trabajo se ha publicado en Nature Immunology .
Utilizando tecnologías avanzadas, el equipo, incluido el investigador de la UCI Guus Leijte, pudo seguir de cerca cómo cambia el sistema inmunológico durante la fase inflamatoria aguda y la fase posterior en la que el sistema inmunológico está paralizado.
En el laboratorio, el primer autor, Farid Keramati, examinó las células inmunitarias obtenidas de la sangre y la médula ósea de los participantes. Observó que ciertas células inmunitarias, los monocitos, no maduraban correctamente tras la respuesta inmunitaria aguda y su funcionamiento era deficiente.
Los investigadores identificaron así un mecanismo crucial que contribuye a la parálisis inmunológica, ya que estos monocitos desempeñan un papel vital en la defensa del organismo contra las infecciones.
Keramati, quien trabajaba en el Centro Princesa Máxima durante el estudio, explica: «Este análisis exhaustivo nos proporcionó una comprensión detallada de lo que sucede durante una respuesta inmunitaria. Esto nos brindó pistas para posibles tratamientos que podrían revitalizar las defensas debilitadas del cuerpo contra las infecciones».
Los investigadores añadieron entonces un fármaco ya existente, el interferón beta , a los monocitos en el laboratorio. Este fármaco se utiliza para el tratamiento de la esclerosis múltiple (EM), en la que el sistema inmunitario no funciona correctamente, lo que provoca inflamación en el sistema nervioso central. El interferón beta tuvo efectos beneficiosos en los monocitos paralizados. Tras la administración del fármaco, los monocitos maduraron y mejoraron su función.
Investigación de seguimiento sobre la parálisis inmunitaria
Según el investigador principal, Matthijs Kox, estos resultados son prometedores, pero son necesarios más pasos.
Hasta ahora, solo hemos estudiado el efecto del interferón beta en las células en el laboratorio. El siguiente paso es administrar este fármaco a participantes sanos durante la fase posterior a la administración de endotoxinas. Queremos investigar si esto puede contrarrestar la parálisis inmunitaria.
En otro posible estudio de seguimiento, los investigadores pretenden investigar si el interferón beta puede mejorar la función de los monocitos en pacientes con sepsis en la UCI. «De ser así, podríamos contar con un tratamiento potencial para ayudar a estos pacientes», afirma Kox.
Más información: Farid Keramati, et al. La inflamación sistémica altera la mielopoyesis y las respuestas al interferón tipo I en humanos, Nature Immunology (2025). DOI: 10.1038/s41590-025-02136-4
